El confinamiento impulsa la creatividad y da algunas buenas sorpresas de cómo todo se puede hacer de otras maneras. Una vez superada la epidemia del coronavirus, de paso se habrán aprendido nuevas lecciones.
En estos días el mejor aliado son las nuevas tecnologías para aprender y entretener sin cruzar la puerta. Hasta el mundo del motociclismo se ha puesto a correr online, hace unos días Álex Márquez debutó en el MotoGP haciéndose con la victoria en su primera carrera virtual.
La categoría reina del motociclismo siguió la tendencia cuando anunció el Gran Premio Quédate en Casa (#StayAtHomeGP) de MotoGP, la primera carrera virtual de la historia del Campeonato del Mundo. Después del éxito de la primera carrera, la semana pasada se celebró la segunda, esta vez con más pilotos y mayor seguimiento.
Aunque se dispute en circuitos de videojuego, no falta ni una chispa de emoción. El evento cuenta con grandes estrellas, y Honda no ha dudado en sumarse a la original iniciativa con sus dos pilotos del Repsol Honda Team: el vigente campeón Marc Márquez; y su hermano Álex, actual campeón mundial de Moto2; que debía debutar en MotoGP de la mano de Honda en la temporada 2020, cancelada por el coronavirus. El pique entre ambos hermanos es, sin duda, lo más divertido y comentado de este GP alternativo. “Hacemos como en casa. Quien gane la última vuelta, gana”, comenta Marc. “Ya me vas a ganar en la realidad, ¡déjame ganar aquí!”, respondió Álex.
El primer Gran Premio Quédate en Casa, celebrado en el Autódromo del Mugello del videojuego de MotoGP, terminó siendo para Álex una manera muy especial de debutar en las filas de MotoGP. Una carrera diferente, divertida y, sin duda, histórica en la que el hermano menor consiguió imponerse. Seis vueltas en las que Álex mantuvo a raya al italiano Pecco Bagnaia (Pramac Racing) mientras Maverick Viñales (Monster Energy Yamaha MotoGP) completaba el podio, dejando fuera al francés Fabio Quartararo (Petronas Yamaha SRT), que se llevó la pole y la vuelta rápida de la carrera.
La emoción de la batalla entre Álex y Bagnaia terminó con la caída del segundo y la escapada del primero, que cruzó la meta en una victoria difícilmente comparable a ninguna otra en la larga historia del campeonato. El único piloto que debutaba en la categoría reina se alzó como ganador, una hazaña que nunca ha ocurrido en las carreras reales de MotoGP.
Tras la primera carrera en Mugello, la semana pasada se celebró la segunda en el Red Bull Ring austriaco, en la que Álex volvió a derrotar virtualmente a su hermano Marc en la lucha por el tercer puesto.