Takuma Sato rebasó a Scott Dixon, previamente dominante, con solo 15 vueltas restantes en las 500 Millas de Indianápolis, logrando su segunda victoria en el famoso “Brickyard” en una carrera dominada por equipos y pilotos de Honda.
Aunque lideró solo dos veces durante un total de 27 vueltas, el Rahal Letterman Lanigan Honda de Sato fue rápido cuando se necesitó, desde la última ronda de parada en pits hasta la bandera a cuadros. Saliendo de pits en segundo lugar a Dixon, Sato se colocó al frente en la vuelta 185, después de detener varios intentos de Dixon de volver a posicionarse, todo mientras ambos se abrían camino en la transitada pista. La carrera se decidió en la vuelta 196 de las 200 programadas, cuando Spencer Pigot se estrelló con fuerza al salir de la curva 4, lo que llevó a que la carrera terminara bajo la bandera de precaución. La victoria es la segunda en Indy para Sato, luego de su triunfo inicial en “500” en 2017.
Antes de las últimas paradas en pits, Dixon había dominado el día con su Chip Ganassi Racing Honda, liderando 111 vueltas, el máximo de la carrera, buscando su propia segunda victoria en Indy. Comenzando en el medio de la primera fila en el campo de 33 autos, Dixon tomó la delantera en la bandera verde y pasó a controlar gran parte de la competencia de 200 vueltas, especialmente después de que Alexander Rossi, en un Andretti Autosport Honda de carrera fuerte, se estrellara en la vuelta 143. Antes de su contacto con la pared, Rossi lideró cuatro veces para un total de 17 vueltas mientras él y Dixon se mantenían alejados del campo en la parte media de la carrera.
Pero los dos Rahal Letterman Lanigan Honda se hicieron fuertes en las últimas vueltas, y el compañero de equipo de Sato, Graham Rahal, cerró la brecha con el par líder en las últimas vueltas para terminar tercero. Después de un decepcionante esfuerzo de calificación, Santino Ferrucci realizó un emocionante esfuerzo al final de la carrera, terminando cuarto para completar una barrida de Honda 1-2-3-4 en la meta.
Los pilotos de Honda reclamaron ocho de los 10 primeros puestos, con James Hinchcliffe recuperándose de un problema de embrague que encontró en su segunda parada en pits para terminar séptimo, con su compañero de equipo en Andretti Autosport, Colton Herta, octavo. Jack Harvey tuvo su mejor resultado en Indy hasta la fecha con un resultado en el noveno lugar para Meyer Shank Racing; mientras que Ryan Hunter-Reay completó el top 10 en su Andretti Autosport Honda.
“Creo que teníamos el mejor auto. Solo que estábamos a una vuelta de Dixie (Scott Dixon) en términos de estrategia de combustible, y hacer el kilometraje de combustible hasta el final fue un poco arriesgado. No podía usar la potencia máxima para cambiar de un lado a otro y Dixon siguió acercándose por la curva 4 (en la última vuelta con bandera verde), apenas y pude detenerlo. Es algo increíble; todos hicieron un gran trabajo. HPD (Honda Performance Development) y Honda nos dieron mucha potencia y mucho consumo de combustible”, comentó Takuma Sato del equipo Rahal Letterman Lanigan Racing Honda.
