El constante avance en la tecnología ayuda a que nuestra industria automotriz vea mejoras e innovaciones cada vez más sorprendentes. Muchas veces estas ideas tienen éxito y en otras ocasiones no tanto.
Por eso les presentamos algunas de las ideas que se pensaron iban a solucionar o alguna vez solucionaron problemas pero ya hay alguna mejor opción o simplemente nunca fueron una respuesta práctica.
Motores nucleares
Al finalizar la Segunda Guerra Mundial el mundo había visto el poder (y la devastación) de la energía nuclear e inmediatamente se pensó en aplicar esta tecnología para abastecer de energía a las ciudades y a los autos.
Aunque reactores nucleares se utilicen actualmente en algunos transportes con aplicaciones militares (submarinos y portaaviones), pero cuando se trata de un vehículo civil esto implica riesgos en la seguridad. Las principales objeciones fueron:
- Para evitar la contaminación radioactiva, se necesita una capa aislante de 50 toneladas y varios metros de grosor
- Un choque podría ocasionar la explosión del reactor
Ford fue la principal marca que estuvo trabajando en este tipo de modelos y presentaron los prototipos Nucleon y Seattle-ite XXI.
Faros escamoteables
Hay una característica en los autos que grita “los 80’s” los faros que están escondidos y salen del cofre. A este tipo de faros se les conoce como “pop up” o escamoteables. Aunque son piezas icónicas ochenteras, esta tecnología existe desde 1936.
Los principales motivos por la cual se dejaron de usar fueron por no ser aerodinámicos, también por no ser prácticos al momento de fallar el sistema de apertura, pues te podrías quedar sin luces y en caso de atropellar a un peatón, estos significaban más lesiones para el accidentado.
En Honda y Acura podemos encontrar este tipo de faros en los modelos Honda Accord (1986-1989) y en Honda/Acura Integra (1986-1989).
Mapas físicos
Actualmente si vas a una ciudad que no conozcas es bastante fácil recibir ubicaciones mediante el GPS de tu teléfono móvil e incluso gracias a que existen aplicaciones como Waze, también podemos ver el estado de los caminos, si hubo accidentes y la cantidad de tráfico que hay.
Lo anterior hace que los mapas que se compraban en físico queden obsoletos e incluso algunas compañías como la famosa “Guía Roji” se declaren en quiebra.
